miércoles, 30 de marzo de 2011

Tú la llevas...








Me gustaría que me quisieses,
cómo querrías a tu mejor amiga de la infancia,
cómo si fuese esa vecina con la que todos los días juegas en la plaza.

Los adultos me aburren, con sus expectativas y exigencias.
No me quieras como un adulto.



¡Inventémonos nuevos juegos todos los días!

miércoles, 23 de marzo de 2011

No saben de motivos, solo hablan de destino

Ya todo está claro,
las conclusiones no son muy buenas.
Este mundo está muy decorado.

Bucles, donde deberían de haber espirales.
Dinero, asfalto, celos, tele, complejos…
Cualquier cosa les vale,
mientras sea superfluo.

Que extraña sensación,
cuándo comprendí que yo no nací para editar un libro,
para ser una pintora reconocida
o liderar una revolución.

Son cosas que puedo hacer,
pero sería estúpida si creyese,
que estoy aquí para eso,
que tengo algún tipo de destino o deber

Dicen que te esfuerces y trabajes, que seas sano y normal.
Desde que naces, todo ese rollo de triunfar.
Al final todo se resumen a;
vivir, envejecer y contaminar.

miércoles, 16 de marzo de 2011

recorridos sin caminos


Piedras y llanos,

o un caminito bien asfaltado...




Tú eliges.


Total, en cualquier lado te comen o te atropellan, ahí no reside la diferencia.
Está en las veces que tropiezas.

lunes, 7 de marzo de 2011

Mi tragicómedia favorita


 
El día en el que conocí,
al chico que arrastraba los pies.
Sin esperarlo, siempre queriéndolo,
Alah, todo del revés otra vez.

Quizás su problema fue,
que veía gris cuando yo veía color.
El mío,
que solo tendría que haberle gritado,
para que me hiciese más el amor.

Él me decía bonita todos los días,
cuando me contaba sus sueños yo siempre aparecía.
Yo notaba como mi sangre ardía,
sentía tanto que solo me salían tonterías.

No será por no haber pensando en el problema,
no será por nuestras ganas de querernos.
Pero no es tan fácil, cuando empiezas a necesitar su aire.
Cuando siempre que me ahogo,
me asusto y lloro.

Aun no sé,
en que momento todo se volvió inmenso.
Aún echo de menos,
los días que empezaban y acababan en él.
Aún espero, que en algún momento se le escape un beso.
Aún le quiero,
como para llorar escribiendo esto.

Al chico que arrastraba los pies,
siempre quería llevarlo en mi bici.
Pero los trayectos largos cansan,
no sé si porque no sabía o no le ponía ganas,
pero nunca quería pedalear conmigo a la espalda…

martes, 1 de marzo de 2011

Sobredosis




Aquí la gente está cortada.
Cuidado a quién te metes que te puede dar un ataque al corazón.


:/