sábado, 1 de octubre de 2011

Antes de


La diferencia de;
Tomarse las cosas tal como vienen.
Con la certeza de;
No acoger lo gris,
como parte de mí.

La lluvia dejó de reconfortar.
No siempre, a veces,
-          en la soledad (que no a solas).

Cuando el cuento,
Ahora se vuelve ensayo,
de melancolía e incertidumbre.

De versos que utilizo,
para revindicar mi decepción,
del intragable dolor,
que no siempre, sufro.
No siempre.

Dejar de esperar lo mejor,
dolorosa manera,
de alterar la decepción.
Y concebir las dosis de empatía,
de cualquier manera.

Como milagro,
como algo inmerecible.
                   - Y hacerlo mio.